La sonrisa en tu cara
no significa la ausencia de problemas,
sólo la habilidad que tienes de ser feliz
por encima de ellos.
Así que píntate una sonrisa
y sal a la calle a pasearla.
Los demás no tienen por qué contemplar
la fealdad de tus pesares,
sino la belleza de tu fortaleza.
Bajando al abismo
es como recuperamos los tesoros de la vida.
Cuando tropezamos,
cuando encontramos el obstáculo
que nos hace caer,
es cuando encontramos el tesoro.
Nuestros miedos, en los que tememos entrar,
suelen ser la fuente de lo que justamente estábamos buscando.
Más que simplemente existir, vive.
Más que simplemente tocar, siente.
Más que simplemente mirar, observa.
Más que simplemente leer, absorbe.
Más que simplemente escuchar, oye.
Más que simplemente presenciar, entiende.
Más que simplemente pensar, reflexiona.
Más que simplemente hablar, por favor, ¡di algo!
Si realmente quiero mejorar la situación, puedo trabajar en lo único sobre lo que tengo control: yo mismo. Todos tenemos un poder y una capacidad inconmensurables para reinventar nuestra vida.
Como lluvia fresca que empapa la tierra, nuestras palabras dejan huella... Si son amables, los ecos que escucharemos también lo serán. Cuida tus palabras... ellas tienen poder. De ti depende si las usas para bien o para mal...